Texto sobre la serie de pinturas Destellos: ¡Abracadabra!
Todas las pinturas aquí: Destellos : ¡Abracadabra!
Todas las pinturas aquí: Destellos : ¡Abracadabra!
Destellos automáticos que
producen el inicio de una aventura fascinante; la construcción de una
arquitectura del sueño. En su búsqueda buscándome me encuentro mediante el
azar, la improvisación, el error como forma de trabajo, y la meditación profunda
y alocada del sueño en el sueño. Destellos que son fragmentos de la realidad
total que empalmo en una suerte de disociación de la imagen del mundo, tal como
el mundo se disuelve y se re organiza frente mí. Es ese acto interno que se
vuelve externo. Es ese acto externo que
se hace interno. Múltiples elementos componen la imagen total, es decir, partimos
de que lo que vemos en frente nuestro es un pedazo del universo, y también es, para
un instante, nuestra totalidad. Pinturas que contienen el mundo en sí mismo, a modo de un collage,
evidentemente, pues no existe otro modo de hacerlo, de organizar poéticamente
este caos, y ¡atención!, funciona a la inversa, es decir, el collage se hace
sin saberlo, el collage ya pre-existe, es
este objeto que es mi existencia en un mundo de objetos que son todos y
todo los demás. Y en el acto de crear, una vez brotado desde ese
espacio llamado inconciencia, todo lo que aparece a la vista son los fragmentos
de la gran realidad diurna. Estos destellos que se expulsan como si la mente y
el cuerpo erupcionará, no soportara el devenir, el tiempo, la infamia, la
eternidad aquí como una tumba que suena hacia el vacío, son fragmentos de un
fragmento mayor donde está la totalidad del universo, porque lo que ven
nuestros ojos son por un instante y a cada instante un todo.
Estos destellos en pequeño formato, forman esta serie de
pinturas donde cada una es el mundo entero y a su vez un átomo, está contenido
todo y no lo está. Recreando así la creación universal, a partir de lo que veo,
y de lo que ud. vea desde su propia libertad visionaria y hacia donde la imagen
le conduzca, y eso es tan cierto como lo
que yo veo, intuí, creí y finalmente hice. Tocar la inconciencia colectiva, el
deseo común, la alucinación común y volcarlo a una imagen pictórica la hace
multi-interpretativa porque alcanzó un grado de realidad mayor, de lo que se
denomina como REAL. De este modo, la imagen es mas de todos, democrática,
plural, toca a quien sea y hasta donde sea, honda, abismal, visionaria, no te
dice lo que es, sino te deja verte, viajar en las mil posibilidades que algo es
y no sólo en la ya codificada. Te hace desprenderte y armar tu propio collage,
del mundo que frente a ti ves, soportas
y amas a diario, para encontrarte con la magia, esa que habla el lenguaje que
contiene todas las lenguas que existen.
E intentar esa magia implica una
búsqueda semejante al que se emprende en
una carretera infinita, con esa nostalgia de no poder ver lo que no existe
(aún), en el camino encontramos hitos, pueblos,
personas, pero la búsqueda continua, y cada vez alcanzo un pedazo más de
esa; mi propia utopía. Aquí, muestro parte del proceso de esa búsqueda. Subiré cada cierto las
imágenes que sigan surgiendo. Esté al tanto, que el viaje es hacia uno y hacia todo y por ello infinito.
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